La segunda constelación del zodiaco está relacionada con el mito de Orión, el gigante cazador. Así, mientras que con una mano sujeta los largos cuernos del animal con la otra se dispone a descargarle un certero golpe.
No lejos de allí, huyendo permanentemente de él, se encuentran las Pléyades, hijas de Atlante y Pléyone. Sus nombres son: Alcíone, Celeno, Estérope o Astérope, Electra, Maya, Mérope y Táigete. (Higinio incluye también a Calipso).
Las Pléyades formaban parte del cortejo de Ártemis. Orión se enamoró de Mérope y la perseguía, junto a sus hermanas, por los bosques y praderas de Beocia. Cinco años duró el acoso hasta que ellas solicitaron, a Ártemis, su protección. Los dioses se apiadaron de ellas y Zeus las convirtió en palomas y las colocó en el cielo.
Excepto Mérope, las demás se unieron a dioses y tuvieron una numerosa descendencia de héroes míticos.
Sobre la frente del toro se encuentran las Híades, también hijas de Atlas y Pleyone. Sus nombres son Fésile, Corónide, Eudora, Ambrosía, Feo, Polixo, y Dione. Estas ninfas cuidaron de niño a Dionisos, cuando fue transformado por Hermes en un cabrito para evitar la cólera de Hera, hasta entregárselo a Ino. Zeus agradeció su trabajo transformándolas en estrellas.
No lejos de allí, huyendo permanentemente de él, se encuentran las Pléyades, hijas de Atlante y Pléyone. Sus nombres son: Alcíone, Celeno, Estérope o Astérope, Electra, Maya, Mérope y Táigete. (Higinio incluye también a Calipso).
Las Pléyades formaban parte del cortejo de Ártemis. Orión se enamoró de Mérope y la perseguía, junto a sus hermanas, por los bosques y praderas de Beocia. Cinco años duró el acoso hasta que ellas solicitaron, a Ártemis, su protección. Los dioses se apiadaron de ellas y Zeus las convirtió en palomas y las colocó en el cielo.
Excepto Mérope, las demás se unieron a dioses y tuvieron una numerosa descendencia de héroes míticos.
Sobre la frente del toro se encuentran las Híades, también hijas de Atlas y Pleyone. Sus nombres son Fésile, Corónide, Eudora, Ambrosía, Feo, Polixo, y Dione. Estas ninfas cuidaron de niño a Dionisos, cuando fue transformado por Hermes en un cabrito para evitar la cólera de Hera, hasta entregárselo a Ino. Zeus agradeció su trabajo transformándolas en estrellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario